El señor Corbera se ha sentido aludido en los comentarios de la última crónica y pide que sean retirados por "respeto". La respuesta debe ser pública porque no hay alusiones o comentarios hacia Javi Corbera y mucho menos falta de respeto (¡cómo puede jugar si ha tenido un accidente y además lo comunicó!). Efectivamente, la cita nominal a Corbera (... Nacho y Claudio) dice "... reclamar minutos", lo cual es una afirmación que no implica crítica disciplinaria sino mala suerte, mal fario o lo que sea, pero una realidad que deben aceptar porque otros no han tenido esa mala suerte y concurren regularmente, por tanto. Y reclaman la compensación a ese hecho (al concurrir regularmente y con todo en regla).
El aviso para navegantes (segunda ocasión en este curso), es una llamada de atención a la falta de respeto a los compañeros, no por parte de Javier Corbera (chaval apreciable y apreciado por todos) sino por quién en ese momento se sienta aludido en tanto en cuanto ha dejado colgados a los compañeros que, en buen número, se quejaron de ello: Pablo (dos horas de sueño, lesiones en los piés y allí estaba), Rafa, Bordas, Eric, Manu (con vomitera y pocas horas de sueño), Auró, Piqué, Elías...
Seguro que los ausentes lo son por motivos justificados y absolutamente aceptables, pero la realidad es que no estaban y no lo sabíamos con tiempo para reaccionar. Lo que los compañeros y los técnicos recriminan, acusan y critican es mucho más simple: Organicémonos... que estamos en la era de las comunicaciones, de Internet y la telefonía móvil, que nos vemos para tomar cervezas y/o Kas naranja, que el más tonto del equipo hace relojes con los ojos vendados.
La verdad es que la temporada no ha ido mal en líneas generales. Pero hemos hecho, casi todos, muchos esfuerzos de manera solidaria y comunitaria para que así fuera. Este Club se asienta sobre un conjunto de valores como la amistad, el compañerismo, la solidaridad; de deseos como la diversión, la felicidad; de esperanzas como la evolución física y deportiva... y la competición fuerte pero educada, bajo la marca GP3 (iniciales y número de un jugador de fútbol que conocemos, admiramos y apoyamos y él nos apoya: Gerard Piqué).
La evolución y mejora de muchos jugadores ha sido notable, valorable el mantenimiento de otros que renunciaron a equipos de relumbrón, y destacable el buen comportamiento de casi todos. Tenemos un entrenador de primera que ha hecho un esfuerzo de adecuación al grupo pero exige compromiso, y aporta un conocimiento profesional. La primera temporada es de asentamiento y la segunda nos exigimos ganar la liga. Quién no esté en esta línea debe marcharse a las gradas. Y comunicarlo.
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